Qué debe llevar un botiquín de viaje

¿Por qué es importante el botiquín de viaje?

Cuando planeamos un viaje a menudo hacemos una gran lista de todo lo que necesitamos: ropa, bolsa de aseo, zapatos, calcetines de repuesto, mochilas, maletas, cargadores del móvil, etcétera. Sin embargo, rara vez llevamos un botiquín de viaje.  

En ocasiones en la bolsa de aseo metemos algún analgésico, alguna tirita y con eso creemos que es suficiente. Pero no lo es.  

Por un lado, cuando estás de viaje por carretera puedes necesitar ayuda inmediata, porque pueden pasar minutos e incluso horas hasta que encuentres una farmacia. También tardarás unos minutos en apartarte de la autovía o autopista y encontrar una zona de descanso. Así que es conveniente contar con una ayuda inmediata. Cuando estás de viaje puedes buscar tu botiquín en el maletero o en un compartimento interior si tiene espacio suficiente. 

Por otro lado, una vez has llegado a tu destino, que puede ser otra provincia, país u otro continente, es conveniente que te lleves el botiquín contigo. Olvídate de dejarlo en el hotel o alojamiento en el que te hospedas, llévalo siempre en tu mochila o bolso, porque ante un imprevisto será más fácil que te ayuden en el hotel, además ellos tendrán los teléfonos de emergencia necesarios y tienen más información para saber qué hacer en cada momento. 

Pero si estás fuera y sufres algún percance o contratiempo, tendrás que actuar rápido y sin la ayuda de nadie. Por eso es importante que tengas a mano lo imprescindible como analgésicos o sales de rehidratación oral. Este y otros consejos debes tenerlos en cuenta a la hora de viajar.

¿Qué debes tener en cuenta al prepararlo?

A continuación, te ofreceremos 6 artículos que siempre debes llevar en tu botiquín de viaje, pero dependiendo de tu situación personal, tus necesidades, tu salud, etcétera, deberás llevar algunas más. Por ejemplo, las personas con diabetes deben viajar con algún extra, del mismo modo que si eres una persona propensa a sufrir ataques de pánico puedes llevar algún tipo de tranquilizante, o si tienes bajadas de tensión de forma recurrente puedes viajar con chocolate negro.  

Tus necesidades personales y el transporte 

Por tanto, lo primero que debes considerar son tus necesidades, por ejemplo, si sufres alguna enfermedad crónica o trastorno que requiera medicación diaria. En el caso de que incluyas fármacos, es recomendable tener en cuenta tus alergias existentes para elegir el tipo de medicinas que vas a llevar. También contempla que si viajas solo puedes necesitar un botiquín más preparado.  

En segundo lugar, debes tener en cuenta el transporte. Por ejemplo, aunque en general no sufras mareos, si vas a viajar en barco y es la primera vez que lo haces, no puedes descartar posibles mareos o incluso vómitos. Por eso, mejor prevenir y llevar biodramina. O si viajas en avión no es mala idea que incluyas algunos chicles ya que algunas personas sufren presión y taponamiento en los oídos y de ese modo ayudas a que se abran las trompas de eustaquio, que controla la presión alrededor del tímpano. 

El lugar al que viajas 

Finalmente, debes tener en cuenta las características culturales, climatológicas y los servicios médicos y básicos que tiene el lugar al que viajas. 

Por ejemplo, si viajas a un lugar donde existen muy pocos centros de salud y es difícil que te atiendan en ellos deberás llenar mucho más dentro de tu botiquín que si viajas a una ciudad donde hay farmacias en cada esquina y la atención sanitaria es de fácil acceso.  

Las condiciones climáticas también pueden advertirte de posibles caídas, por ejemplo, si viajas a un lugar con hielo o nieve en las calles y quizá deberías llevar medicamentos antiinflamatorios y vendas de compresión para aliviar el dolor muscular por una posible contusión. O si por el contrario viajas a un país caluroso y húmedo es importante que lleves siempre un repelente de insectos, dado que en esas zonas son más comunes.

6 cosas que no pueden faltar en un botiquín de viaje

Para ello antes debes tener en cuenta qué podría ocurrirte y qué necesitarías en cada caso. Más allá de si sufres alguna patología crónica o de las características del lugar al que viajas, debes prepararte para: 

• Heridas y cortes 
• Catarros y resfriados 
• Dolores de huesos, músculos o dolores menstruales 
• Problemas gastrointestinales 
• Picaduras 
• Lesión o cansancio en pies y piernas 
• Mareos 
• Quemadura solar 
• Alergias 
• Insomnio 

Si estás preparado para todos estos contratiempos y además tienes en cuenta tu salud y aquellos inconvenientes que sueles experimentar en los viajes, y te has preparado para el lugar de destino y el medio de transporte; tu botiquín de viaje será perfecto. 

Esto es lo que nunca puede faltar: 

Analgésicos y antiinflamatorios 

En los viajes se puede producir tensión en las articulaciones y en los músculos, sobre todo si caminas más de lo que estás acostumbrado. También por el transporte o por una mala noche puedes sufrir algunos dolores de cabeza. El ibuprofeno, el paracetamol, o el ácido acetilsalicílico (aspirina) son buenos analgésicos y antipiréticos que nunca pueden faltar. 

Antiácidos 

En las vacaciones se pueden producir cambios en nuestra dieta, alimentación y horarios. Si, además, estamos de viaje las diferencias pueden aumentar notablemente por la nueva gastronomía. Por ello, si viajas, y especialmente a un país lejano, conviene que lleves contigo un antiácido en tu botiquín de viaje.  

De ese modo evitarás el estreñimiento o la diarrea, que más allá de provocar molestias si perduran varios días pueden originar graves problemas de salud.  

Gotas oculares 

A veces en los viajes no dormimos bien y los ojos se cansan, si además viajas a un lugar con mar o piscinas, puede que tus ojos se irriten con más facilidad. Por otro lado, nunca sabes en qué momento podrás sufrir alguna irritación grave por una simple mota de polvo. Los ojos son muy delicados y por eso conviene llevar siempre gotas oculares de suero salino. 

Apósitos 

Si vas a hacer rutas por la naturaleza o crees que podrías sufrir algún corte o herida en tu viaje, lo mejor es que lleves algunos apósitos en tu botiquín. Puedes llevar tiritas, esparadrapos, gasas, vendas compresivas… lo que creas necesario. También puedes llevar parches para ampollas ya que en los paseos y caminatas se pueden formar algunas.  

Antihistamínicos 

Por reacciones alérgicas al polen, a la comida, o por picaduras de insectos, los antihistamínicos como la cetirizina son un tipo de fármacos que debes llevar en tu botiquín de viaje. Si los síntomas son más intensos se añaden corticoides como la Cortisona (hidrocortisona) o la Prednisona, entre otros. 

Fármacos anticinéticos 

Muchos trayectos turísticos pueden producir mareos, especialmente los viajes en barco, en crucero, en avión… Así que cuenta siempre con compuestos a base de biodramina que podrán eliminar tu mareo en algunos minutos.

Características de un buen botiquín de viaje

Un botiquín de viaje debe tener unas características para ser óptimo, de lo contrario no será tan útil como crees. 

• Botiquín actualizado: es importante que al menos una vez al año actualices tu botiquín. Es importante que revises si los medicamentos y artículos se encuentran en buen estado, si hay alguno caducado, si todavía pueden cumplir su función… o cargarás con peso para nada. 
• El embalaje de los medicamentos: es muy importante que no guardes los medicamentos sueltos y esto tiene que ver con el punto anterior, ya que si no los guardas en su paquete original es mucho más probable que se deterioren antes. También es muy importante que guardes el prospecto o las instrucciones, para tomarlos adecuadamente, sin que tu salud peligre. 
• Tamaño: es importante que puedas llevarlo contigo en tu bolso, mochila o neceser de mano, ya que debes estar preparado en todo momento. Por eso es mejor que no sea demasiado grande o bien, que tengas dos de diferentes tamaños, uno con solo lo necesario y otro con más artículos. 
• Formato y estructura del botiquín: si lo vas a llevar contigo es mejor que sea ligero y que tenga una forma que pueda adaptarse a los espacios. Además, los materiales son importantes para que pueda garantizar la seguridad de los medicamentos del interior. 
• Guarda información sanitaria: es una buena idea guardar dentro del botiquín información sobre cómo funciona la sanidad o los hospitales del lugar al que viajas, cuáles son los más cercanos, dónde hay farmacias, cuál es el teléfono de emergencias…

Conclusión

¿Qué debe llevar un botiquín de viaje? Esto dependerá de tu salud, del lugar al que viajes y del medio de transporte que elijas. Y por supuesto, hay algunos básicos que debes llevar siempre como los analgésicos, los apósitos o los antiácidos. Asimismo, ten en cuenta que el botiquín de viaje debe cumplir con algunas características para que pueda serte más útil, por ejemplo, no ser muy pesado y tener un tamaño reducido.